miércoles, 18 de noviembre de 2015

Para ti

Hoy te he visto, de pronto, en la pantalla del ordenador y se me ha arrugado el corazón.

He podido sentir la contracción en mis entrañas. Tú siempre me remueves, aunque no deba ser así.

Me dueles.

¿Por qué? ¿por qué? ¿por qué?

Yo sé la respuesta.

Junto a ti he sido más yo que nunca, junto a ti he aprendido, he crecido, he mejorado.
He vivido las sensaciones más intensas de toda mi vida.

Tú me has vuelto loca.

Y ¿qué es esto? ¿dónde estamos? ¿qué cojones estamos haciendo?

No te pregunto dónde estás, porque lo sé. Estás en mí, enquistado. Estás en mi mente cuando desayuno con mi preciosa familia, cuando trabajo con ganas y me siento eficaz, cada vez que comparto datos con otro ser humano.

¿Eso fue lo que nos pasó? ¿Esa era toda la información que debíamos compartir?

No lo creo.

Nos cortaron la línea las circunstancias.

¿Piensas en mí alguna vez? Estoy segura que sí. Y que te preguntas qué es esto, dónde estamos y qué cojones estamos haciendo.

Somos idiotas.

Y hoy, que consigo todo lo que me propongo, que soy lo que siempre quise ser, que por fin creo en mí, también te recuerdo. Porque tú siempre lo hiciste, siempre me veías cuando ni yo misma lo hacía.

Gracias por eso.

Gracias por enseñarme el pensamiento práctico, por compartir mis ideas de bombero, por divertirnos tanto, por esos pitis compartidos, por permitirme quererte tanto y por quererme tú a mí.

La vida nos tiene preparados distintos caminos ahora, aprovechemos para recopilar información, porque en esta misma vida nos volveremos a encontrar y deberemos compartirla y ya no se acabará nunca.

Nos veremos pronto, nos daremos un abrazo apretao y no nos acordaremos  de que ha pasado el tiempo, ¡tengo tantas cosas que contarte!

Hasta entonces, cuídate mucho y sé muy feliz.

Tu amiga que te añora y te quiere con todo el corazón.




2 comentarios:

¿Qué te cuentas?